Los gatos esfinge o faraones forman parte de las razas exóticas en el ámbito de los felinos domésticos y, si bien no es tan frecuente toparnos con uno de estos, es una raza que se ha ido popularizando con el paso de los años a raíz de su particular belleza y morfología. Ahora bien, esta raza prácticamente no posee pelaje lo que los hace mucho más vulnerables a distintas patologías y enfermedades. En el articulo de hoy revisaremos cuales son los cuidados especiales que debemos tener en caso de traer un gatito esfinge a casa, para garantizarle al animal la mejor calidad de vida posible y una experiencia optima.
El gato esfinge
Empecemos con una ligera introducción para conocer un poco mejor a esta raza felina: estos gatos son originarios de Egipto, como muchos de ustedes habrán deducido por el nombre. Si bien son oriundos de allí, comenzaron a ser criados en el país de Canadá hace aproximadamente 50 años por lo que se trata de una especie gatuna relativamente joven.
Existen dos variedades distintas de esta raza gatuna: por un lado, tenemos a los americanos y por el otro a los europeos. En el caso de los europeos, cuentan con una fisionomía más larga y alta mientras que el gato americano es más compacto. Por otro lado, dependiendo de la región podrá variar el color de su pelaje o de su piel pudiendo ser rojo, crema, azul o chocolate.
Cómo cuidar a un gato esfinge
La principal característica que hace que los gatos esfinge sean tan llamativos es que no tienen pelo: o al menos eso parece. Poseen una capa muy finita de pelaje, lo que los hace bastante más vulnerables a todo tipo de dolencias y lo que además requiere que se tengan ciertos cuidados especiales con ellos.
Proteger su piel
Como se imaginarán como consecuencia de su fina capa de piel la dermis de estos animales es sumamente frágil. Debe cuidarse de igual manera del frío como del calor y su cuerpo debe rondar siempre los 20 grados. Por otro lado, puede quemarse frente al sol igual que las personas, por lo que deben tomarse los recaudos apropiados para prevenirlo.
Alimentación adecuada
En virtud de su delicada piel es importante evitar que la misma se reseque o no reciba los nutrientes adecuados, por lo que al gato esfinge se le debe dar un alimento acorde a sus necesidades y que le provea de todos los nutrientes imprescindibles para mantener su buena salud. Una dieta alta en proteínas será trascendental.
La higiene
Una característica de esta raza felina es que suelen sudar o transpirar, lo que requiere de cuidados más profundos en lo que refiere a la higiene para que la piel no se irrite como consecuencia de la falta de pelaje. ¿Cómo podemos mantener al gato aseado y seco? Utilizando toallitas húmedas especiales para mascotas o totalmente hipoalergénicas, evitando así cualquier irritación innecesaria.