Entre las enfermedades más frecuentes que puede padecer un gato cuando ya se encuentra entrado en años nos encontramos con el hipertiroidismo. Sin ir más lejos, según estudios frecuentes uno de cada diez gatos mayores a los diez años padece esta enfermedad. Si bien el hipertiroidismo no tiene cura, sí existe un tratamiento para evitar mayores consecuencias y poder llevar adelante una vida saludable y sin problemas. ¿Quieres saber más sobre esta enfermedad felina y cómo tratarla? No te pierdas lo que sigue a continuación.
Lo que hay que saber sobre el hipertiroidismo felino
Como bien les mencionamos al comenzar el articulo, uno de cada diez gatos mayores padecen de hipertiroidismo, situándose esta dolencia entre una de las más frecuentes entre los felinos ancianos. La dolencia es provocada por un exceso de hormonas tiroideas, generadas por la glandula que se ubica en el cuello y que también tenemos los humanos. El hipertiroidismo no tratado genera que el gato se encuentre en un estado de hiperactividad constante, que coma en abundancia pero que pierda peso considerablemente.
Las hormonas tiroideas se ocupan de manejar una gran cantidad de procesos organicos en el cuerpo de los gatos, por lo que cuando se producen en exceso pueden traer grandes consecuencias negativas a la salud del animal y generar grandes problemas. Si no se trata, el hipertiroidismo puede llegar a deteriorar el estado de nuestra mascota de manera alarmante, por eso es importante saber identificarlo y contar con un tratamiento adecuado.
En cuanto a los síntomas claves del hipertiroidismo felino, debemos saber que esta enfermedad se va mostrando de manera paulatina y a veces puede llevar un cierto tiempo en volverse evidente. Entre los signos más comunes nos encontramos con la típica perdida de peso, los cambios en el apetito y en la cantidad de comida que se ingiere, vomitos y otros trastornos gastrointestinales, hiperactividad y cambios de actitud y humor.
Por otro lado, es normal ver al gato hipertiroideo mucho más irritable y molesto, con un importante incremento de las pulsaciones cardiacas y perdidas de pelo. En los casos más agudos el felino se encontrará en un estado de deterioro y debilidad muy profundo.
El tratamiento del hipertiroidismo felino
El tratamiento que se utiliza para frenar el exceso de actividad de la glandula tiroidea es muy eficaz, por lo que es fundamental que si notamos cualquiera de los síntomas mencionados con anterioridad acudamos cuanto antes al veterinario para obtener un diagnostico certero y completo de la situación.
El tratamiento del hipertiroidismo consiste en tres alternativas fundamentales: terapia de iones, operación o medicinas. Cada una de estas opciones cuenta con sus puntos fuertes y débiles, y cada veterinario deberá evaluar cada caso concreto para establecer cuál será la mejor alternativa para el animal.